IV
El retiro del Genio
«Se puede morir más de una vez. Pero la tumba es sólo una para cada hombre».
En el invierno de 1863, Camilo y su familia irregular se instalaron en São Miguel de Seide, en la casa de Pinheiro Alves, el esposo de Ana Plácido, después de la muerte de éste.
Los últimos 25 años de su vida los pasó, con gran regularidad, en la casa y hacienda de este pueblo de Minho. Paralelamente a los dramas de sus personajes novelescos, Camilo vivirá una sucesión de dramas que lo herirán en lo más profundo de su alma: la muerte y el suicidio de amigos muy próximos; la demencia do Jorge; los desvaríos de Nuno; la muerte de Manuel Plácido, hijo de Ana Plácido; el fallecimiento de una nieta; y la pérdida progresiva de la vista hasta la ceguera.
Detalles de la Casa
de Camilo
(Exterior)
Detalles de la Casa de Camilo (Interior)
El rey D. Luís le otorgó el título de «Visconde de Correia Botelho», en 1885. Pudo haber sido un vano honor, que no halagó su vanidad. Pero lo cierto es que le garantizó un futuro más seguro a Jorge, su hijo loco, y menos propenso a la indigencia. También por ello, en 1888, oficializó su matrimonio con Ana Plácido.
Incapaz de leer y escribir, fuentes muy importantes de su felicidad, se suicidó con un tiro de revólver.
El revólver do suicidio
Usó esta arma para acabar con su vida. Los motivos son insondables, aunque se atribuye el hecho a la imposibilidad de leer y escribir, y, sobre todo, a la falta de Esperanza.
Casa de Camilo
Altar mayor de la Literatura portuguesa, donde se evoca la vida y obra de uno de los mayores genios creadores de la Literatura portuguesa de todos los tiempos.
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